martes, 27 de julio de 2010

UN PUENTE HACIA TERABITHIA de Gabor Csupo – 2007 – (“Bridge to Terabithia”)


Jesse es un chico tremendamente imaginativo y amante del dibujo y de las carreras que no se siente integrado ni en su colegio ni en su casa. Todo cambia cuando llega al vecindario Leslie, una chica que comparte sus mismos intereses. Junto a ella, construirá una cabaña en un árbol y, en las profundidades del bosque, vivirá grandes aventuras imaginarias. Sin embargo, un hecho terrible le hará volver al mundo real… Al que tendrá que enfrentarse.

El cineasta, restaurador y músico húngaro Gabor Csupo es uno de los nombres más importantes de la animación actual. Junto a su mujer, la estadounidense Arlene Klasky, fundó la compañía Klasky Csupo, que se ocupó de animar varias temporadas de las series “Los Simpsons”, “Los Rugrats” o "Ah!!!!!! Real Monsters", además de los largometrajes basados en la última de ellas. Su primera película para la gran pantalla fue la muy irregular aunque interesante “Un puente hacia Terabithia”, a la que siguió el filme de animación "Inmigrants" y el nuevo filme para niños "El secreto de la última Luna".

“Un puente hacia Terabithia” está basada en la famosa y premiada novela homónima de Katherine Paterson, y estuvo en su día también claramente orientada a aprovechar en las taquillas el tirón de sagas fantásticas de los últimos años como “El Señor de los Anillos”, “Harry Potter” o “Las Crónicas de Narnia”. La película, orientada a un público infantil y muy juvenil, trata de ser una obra digna destinada a este mismo público, cosa que básicamente consigue, aunque de ahí no pasa. Narra “Un puente hacia Terabithia” (uno de los reinos mencionados en los libros de Narnia) la historia de Jesse y Leslie, dos niños llenos de inventiva que están a punto de entrar en la adolescencia y que, inadaptados y marginados en su colegio y también en su hogar (el chico especialmente en el segundo), inventan un mundo mágico en las profundidades del bosque que hay cerca de sus casas, en donde, en una cabaña en un árbol, viven aventuras imaginarias enfrentándose a toda clase de seres fantásticos extraídos de cuentos y narraciones como las mencionadas de Tolkien, Rowling o Lewis. La vida feliz que llevan, sin embargo, se les hunde con una inesperada tragedia que les devuelve al mundo real. La novela fue escrita originalmente para el joven hijo de su autora, que había perdido a uno de sus mejores amigos. Por ello, la trama no consiste en que los protagonistas se enfrenten a las fuerzas del mal, ni en que tengan que buscar un tesoro o salvar a un pueblo oprimido, sino en el paso a la madurez de éstos, por lo que el filme se muestra ciertamente fresco en, por lo menos, este aspecto (especialmente cuando sorprende hasta cierto punto con el giro argumental que desencadena la mencionada tragedia -y que no desvelo-). Por desgracia, aquí se queda casi todo. Hay que destacar unos buenos efectos especiales, unas buenas actuaciones de los dos jóvenes protagonistas y un aceptable manejo del drama. El resto de la película es completamente mediocre: argumento lineal, seres mágicos sin demasiada inventiva y personajes y acciones predecibles. Cierto es que es una cinta destinada para niños y que posiblemente muchos de estos niños no pidan nada más. Sin embargo, hubo otras épocas en las que incluso las películas para niños tenían una gran sensibilidad y madurez. “Un puente hacia Terabithia” se queda en el camino de esa sensibilidad y esa madurez. Trata un asunto duro, crudo incluso, pero no sabe llevarlo por un cauce ni duro, ni crudo, ni artístico y ni siquiera imaginativo.

2 comentarios:

Pepe Cahiers dijo...

Es que este tipo de cine, de criaturas mágicas y de mundos paralelos, se han explotado ya hasta la extenuación.

Jordi M.Novas dijo...

no he visto ni Narnia..