sábado, 1 de agosto de 2009

EL GRAN MIÉRCOLES de John Millius – 1978 – (“Bib Wednesday”)


Década de los sesenta en los Estados Unidos. Un grupo de jóvenes amigos pasan el verano entregados a su gran pasión: el surf. Surfean sin cesar buscando las mejores olas y enfrentándose a ellas y, también, experimentan la libertad total de la que sus padres no gozaron integrándose en culturas rebeldes como la hippie o la rockera. Algo, sin embargo, puede estar a punto de acabar con sus idílicas vidas: la Guerra de Vietnam. Por suerte, estos jóvenes tienen algo para enfrentarse a su opresiva sociedad, un proyecto común con el que ninguna circunstancia puede acabar: su amistad de hierro.

Productor, director y guionista, John Milius es un extraño caso dentro de la industria del Hollywood de la generación que saltó a la fama en los setenta (Spielberg, Scorsese, Coppola, Lucas, De Palma…), generación en la que le incluyen unos y de la que le sacan otros. Comenzó en el mundo del cine escribiendo guiones para grandes filmes o colaborando en su escritura, hecho que en su momento le dio un prestigio inmenso. La lista es bien extensa y destacada: “Harry, el Sucio”, “Las aventuras de Jeremías Johnson”, “El juez de la horca”, “Yakuza”, “Tiburón” o “Apocalypse Now”, así como los de las películas que dirigió. Un asunto se repite en su cine y en sus guiones con asiduidad: la historia de hombres que sobreviven, después de un pasado traumático, en un mundo salvaje o corrupto con un código ético y/o de honor propio. Su humor es cínico y muy negro en ocasiones, y sus obras están llenas de carga dramática y violencia lírica. Hay un sentimiento que su cine exalta por encima de todos: la amistad, la amistad como salvadora absoluta de los hombres que se mueven en estos ambientes hostiles. Su estilo ha sido, en su primera etapa, de corte clásico, alejado de efectismos, aunque también ecléctico. Ha trabajado con géneros variados. Anunciado como una joven promesa de su generación, por desgracia no ha cumplido con estas expectativas. Sus obras, brillantes en sus primeros filmes, fueron hundiéndose progresivamente tanto en lo artístico como en lo comercial mientras que, además, acuñaban unas ideas y mensajes que con fundamento provocaron que fuera acusado de fascista. Debutó con el biopic negro “Dillinger”, tras el que vino una de sus grandes películas, “El viento y el león”, cinta de aventuras sobre el enfrentamiento entre oriente y occidente. Llegaron después el soberbio e inolvidable retrato juvenil generacional de surferos “El gran miércoles” (la mejor película de surf de la historia) y la genial “Conan, El Bárbaro”, filmes que terminaron de confirmarle como aquella mencionada promesa del cine. Sin embargo, toda su carrera comienzó a caer en picado tras ellas. Dirigió en 1983 la infame patriotada bélica “Amanecer rojo”, un delirio anticomunista absurdo que roza el puro surrealismo (Cuba y la Unión Soviética se unen contra los USA, que son salvados por un grupo de jóvenes patriotas de buen ver…Para llorar de risa y de pena). A Milius esta cinta le costó todo: le acusaron de fascista en todas partes y hasta le retiraron apoyos dentro de los propios USA. Llegó después el irregular drama “Adios al Rey” y la obra bélica de acción “El vuelo del Intruder”, que pasaron sin pena ni gloria. John Millius, dado de lado por el público y por gran parte de la industria, dejó de dirigir después, y aún no ha vuelto a ponerse tras una cámara. Es, de todas formas, uno de los creadores de la genial serie de TV “Roma”. Una lástima el caso de este prometedor cineasta.

Antes de prácticamente desaparecer (tristemente) del panorama cinematográfico tras haberse hundido hasta el fondo con las bazofias patrioteras “Amanecer Rojo” y “El vuelo del Intruder” (entre las que intercaló el drama “Adiós al rey”), el fascistoide John Millius tuvo una filmografía tremendamente prometedora entre la que se encuentran títulos muy destacados como “Dillinger” o “El viento y el león” y otros directamente gloriosos como “Conan, el Bárbaro” o esta “El gran miércoles”, la que es sin ninguna duda la mejor película de surf de la historia del cine. Alejándose de la mencionada ideología fascistoide que por desgracia exhibió en sus últimos filmes arriba mencionados, John Millius traza, una vez más, un elogio desmedido de la amistad y de los hombres fuertes que no se dejan vencer por las circunstancias hostiles que les ha tocado vivir. En este caso, la siempre traumática y tremendamente actual Guerra del Vietnam (el filme es de 1978) es la que intenta destrozar la amistad imperecedera de un grupo de jóvenes que prácticamente se ven como hermanos y que gastan deliciosamente sus veranos de juerga en juerga, de ligue en ligue y, por supuesto, dando rienda suelta a su pasión, surfeando sin cesar. Millius retrata como nadie la Norteamérica que sale del conservadurismo y de la ranciedad que la había caracterizado gracias a unos jóvenes preocupados por vivir la vida en la libertad más absoluta y que encuentran la salida a un mundo que detestan en el mencionado surf, en el rock n’roll, en el entonces rebelde movimiento hippie o en el ser, sencillamente, un paria consciente y autoimpuesto que no quiere colaborar con el sistema. Esto, por supuesto, les pasa factura, les condena a la marginalidad, a los problemas familiares y sociales y está a punto de destrozar su amistad, lo mejor que tienen (aunque no lo logra: Millius confiaba plenamente en la amistad como en el motor del ser humano, y eso se puede ver claramente incluso una película como la mencionada “Conan, el Bárbaro”). En un estilo luminoso y sobrio, marcado por la espectacularidad de las escenas “de acción” en las olas (el rodaje de las secuencias de tubo es soberbio –y fue la primera vez que se rodaron este tipo de escenas tan difíciles y peligrosas-) y por el aliento lírico y nostálgico que el conjunto desprende, la oda a la amistad que es “El gran miércoles” es la obra maestra definitiva sobre el mundo del surf en el cine y la obra maestra de ese artista al que últimamente y por desgracia sólo se le ha podido ver creando y coordinando la magistral y ya finalizada serie de televisión histórica “Roma”.

1 comentario:

Crowley dijo...

Hola, esta no la he visto, pero siempre he leído maravillas de ella, algo que es de elogiar teniendo en cuenta que es de un tema tan acootado como el surf. Me la apunto, y más sabiendo, como tu dices, que está detrás de la maravillosa serie Roma.
Saludos